Cuando llegamos a hablar de Julio César, que fue asesinado en el año 44 aC, vimos cómo se había desmoronado el edificio republicano casi en su totalidad.
Julio César era un político y militar romano que vivió en una época en la cual la pregunta ¿quién manda aquí? era sumamente importante para los romanos. ¿Era el Senado? ¿eran los militares? ¿eran las asambleas, los magistrados....? Como vimos antes, los militares apostaban cada vez más a recomponer el antiguo poder de los reyes. También vimos que tenían una gran influencia de los reinos de Oriente, los herederos de Alejandro Magno que eran también los herederos de los persas y de los egipcios.
Una etapa fundamental de la carrera política de Julio César fue la conquista de las Galias, que ocupaban más o menos el territorio de Francia en la actualidad. César convenció al Senado de que los Galos eran un peligro inminente para Roma, con lo cual fue autorizado (y financiado) en una gran expedición de conquista. La guerra de las Galias duró casi una década, entre los años 58 y 51 aC, y terminó con la derrota de los Galos. Para muchos romanos, varios siglos después, esto era como una cuenta pendiente.
Vean en este mapa todos los desplazamientos de los ejércitos romanos durante la guerra de las Galias
Y en este otro vean cómo iba creciendo el territorio dominado por Roma alrededor del Mar Mediterráneo
Aunque hasta ese momento no había sido así, desde fines del siglo XIX los franceses consideran que los galos son sus antecesores más antiguos. Ellos en lugar de hablar de Las Galias, hablan de La Galia, como si hubiera sido una sola y unificada. Es en ese ambiente, en el de la Galia 'invadida' por los extranjeros romanos que se desarrolla la historieta de Asterix, que muy pocos de ustedes conocen.
Cuando César regresaba de las Galias, victorioso, hubiera tenido que dejar libres a sus tropas al cruzar un pequeño río llamado Rubicón, pero no lo hizo. Las leyes antiguas de Roma iban perdiendo valor para los generales victoriosos.
Cuando César fue asesinado había acumulado una enorme cantidad de cargos, todos para él, y algunos con carácter vitalicio, además de varios poderes especiales concedidos por el Senado. Era casi un rey, y parecía que lo sería, salvo que fue asesinado por una conspiración de senadores, entre los que se encontraba Marco Bruto, en el cual César confiaba.
En la clase del lunes, que todos habrán hecho los deberes, repasaremos este tema y veremos cómo se responde la pregunta que plantea el historiador Rostovtsev al final de su texto...
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