En la clase pasada ya habíamos hablado algo sobre el Vasallaje. Hoy recordamos que se trataba de una relación entre dos hombres libre y nobles. Ya habíamos anotado que mientras el vasallo le juraba fidelidad a su señor, éste le entregaba un feudo como recompensa, remuneración, compensación... era como una forma de pagarle, pero sin dinero.
En el cuaderno anotamos que la palabra feudo es la derivación de una más antigua de origen germánico (vieh) que significaba 'ganado' (como vacas, por ejemplo), y que luego fue derivando a feu, feud, feod, feudo... y también dejó de designar animales para designar la tierra con que se recompensaba a los vasallos.
Ya hemos visto esta forma de pago anteriormente, porque Carlomagno la usaba, y los germánicos también. Entregaban una tierra en usufructo, no en propiedad, de forma que se podía usar lo que producía, pero no se la podía vender.
Luego hablamos de la servidumbre. Como ya hemos hablado del colonato romano, este tema no nos resulta para nada difícil. La tierra que recibían los vasallos (los feudos) incluía SIERVOS que la trabajaban. Esos siervos pertenecían a la tierra, no al SEÑOR que la había recibido, pero lo tenían que obedecer.
Nos importó muchísimo saber que el señor de ese feudo tenía SEÑORÍO, es decir que tenía un poder total dentro de él. Hacía las leyes, administraba justicia, fijaba y cobraba los impuestos, cobraba peajes si alguien quería pasar por su territorio, podía acuñar monedas con su cara. Era la única autoridad en esa tierra, y ni el rey podía mandar dentro de ella.
Esta imagen es muy antigua y representa el momento en que los siervos pagaban los impuestos al señor |
Finalmente dijimos que en Europa en esa época, aunque había reyes, su tarea no era gobernar los reinos, porque los señoríos tenían todo el poder repartido. El rey tenía señorío solo dentro de sus feudos, no dentro de su reino. El año próximo estudiarán cómo fue que los reyes volvieron a tener un poder en todo el territorio del reino.
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