Tiberio y Cayo Graco (31 de julio)

Hoy hablamos de Tibero Graco y un poco de Cayo Graco.
Muchos pudieron hacer aportes muy interesantes porque se habían preocupado por hacer los deberes.

Lo que más nos importó fue ver la manera en que se relacionaban con las consecuencias de la expansión de Roma por el Mediterráneo. Volvimos a pensar cómo había aparecido y desaparecido la clase media rural romana, y encontramos sentido a las propuestas de los Graco.

Cuando hablamos de su familia, vimos una cosa interesante: en esa época los romanos ya habían conquistado parte de Grecia y de Macedonia, que eran reinos herederos de la propuesta de Alejandro Magno que estudiamos antes de las vacaciones. Los romanos, no todos, pero algunos y provenientes de las familias más ricas y poderosas de Roma, estaban muy impactados con la cultura de Grecia. Ya los habían conocido en el sur de Italia, que era conocido como la Magna Grecia.
Les parecía que su manera de vivir, las estatuas, el cuidado personal, el teatro, las obras literarias, todo era maravilloso, y trataban de dárselo a sus hijos desde pequeños. Así fueron educados Tiberio y Cayo, que eran nietos de Escipión Africano. En clase dijimos los romanos estaban helenizados, porque adoptaban costumbres de los griegos.

Cuando hablamos de Tiberio, vimos que la ley agraria que proponía era de hecho como una de las leyes Licinias. Dijimos que él esperaba que si se aprobaba esa ley, entonces la clase media rural volvería a crecer y sería una buena época para Roma.
Eso no sucedió porque fue asesinado, en medio de un tumulto cuando se estaba por votar la ley.

Casi no hablamos nada de Cayo Graco, su hermano menor. Tenemos que recordar que él también fue tribuno de la plebe, y que propuso nuevamente la ley agraria, junto con otras leyes más. Cayo Graco estaba de acuerdo con volver a formar la clase media rural, pero entendía que había mucha gente con problemas, y que era importante ayudarla: propuso así una ley frumentaria, que era de reparto de trigo a los más necesitados, una ley viaria, que daba trabajo a muchos gracias a la construcción de caminos a lo largo de toda Italia. También quería darle plena ciudadanía romana a todos los italianos. Al igual que su hermano, sus propuestas tuvieron mucho rechazo entre los más ricos y poderosos de Roma. No fue asesinado, pero se suicidó (obligó a un esclavo a matarlo) cuando entendió que la situación no tenía salida para él.

Esta estatua romana representa a Tiberio y Cayo Graco